Con el sol en la espalda la inconfundible silueta del capitán se perfiló sobre el puente. Las órdenes eran claras. La tripulación sobre cubierta se dispuso a cumplirlas.
-Aprovechando el mar en calma retomaremos los ejercicios de abordaje, dijo el Gran Sparrow. ¡¡Atajo de gandules!! –
– Siiiii, siiii, siiii, aulló la tripulación enfebrecida. –
– Como bien sabéis, la mejor manera de hacerse con un buen botín no es precisamente quedarse en el propio navío… ¿Porqué renunciar a otras naves portadoras de riqueza? Que hace falta pólvora, pues vamos en busca de pólvora. Que hace falta Ron, pues a por Ron. Se trata de buscar y agregar valor/contenido. Así que se debe buscar la complementariedad!
Veamos, y ahora ya en términos más prácticos, la mejor técnica de abordaje es la estrategia transversal. Para ello deberemos lograr que nuestra nave esté proa con proa y popa con popa con el navío a abordar. De este modo las probabilidades de acabar chapoteando entre aguas son menores.
Y recordad siempre, un pirata respetable no verá nunca la solución en quedarse en una sola nave! –
diciembre 1, 2009 a las 8:40 pm |
Exacto!
Lo importante no es tener las cosas… sino saber quien las tiene 🙂